Los vestidores de nuestra Cofradía ha procedido a cambiarle el terno a Nuestra Madre de la Divina Gracia con motivo de la Festividad de las Candelas.
Nuestra Madre luce saya de damasco negro y su manto liso, portando el cíngulo rojo que utilizan los hermanos de la Redención en su túnica, como Madre nuestra que es.
Así, nuestra Bendita Madre ya está ataviada de cara a los próximos días de Cuaresma, momento de la preparación de la Pasión de nuestro Redentor.