Nuestro Señor Jesús de la Redención

Nuestro Señor Jesús de la Redención es, junto a la Santa Cruz, la imagen titular de la Cofradía, siendo atribuida a Juan de Ancheta y, según estudios de Valentín Yugueros, realizada en torno a 1570.

Tras haber sido restaurada por la penitencial dado el estado de deterioro en el que se encontraba en el almacén del Centro Penitenciario de Nanclares de Oca (Álava), pudo ser venerada en el Convento de las Madres Benedictinas de Santa María de Carbajal en una pequeña capilla, desde donde puede ser visto a través de una pequeña ventana enrejada en la parte exterior del Convento, provocando que muchos peregrinos se acerquen para solicitarle un buen camino hacia Santiago de Compostela.

Fotografía: NH Álvaro Ramón

La imagen, de estilo renacentista, participó por primera vez en la procesión de la Redención el Domingo de Ramos de 1993, y, a partir de 2001 en el vía crucis que la cofradía realizó por la plaza de Santa María del Camino -conocida como Plaza del Grano- en la jornada del Lunes Santo el cual, posteriormente, fue trasladado al cuarto sábado de Cuaresma.

En la parte inferior de la cruz, se encuentra un relicario con dos astillas de la imagen Nuestro Padre Jesús de la Redención de Sevilla, regaladas a la hermandad en 1992 como gesto de hermanamiento entre ambas corporaciones.

En 2019, como consecuencia de un incidente acaecido durante la procesión de ese año, la cofradía adquirió un nuevo título con la inscripción del monograma INRI para la imagen titular. Para tal fin, la penitencial recurrió a las manos del imaginero sevillano Antonio Luis Troya, el cual realizó un profundo estudio de los monogramas labrados a manos de Juan de Ancheta, con el objetivo de inspirar su hechura en la herencia que este dejó en su obra. El título cuenta además con un dorado en fino oro, obra del dorador hispalense Curro Moreno Alonso.

Nuestro Señor Jesús de la Redención procesiona sobre un trono de madera diseñado en 2001 por el arquitecto Carlos Sexmilo Huarte, al cual se le añadieron en 2011 los guadamecíes realizados por Melchor Gutiérrez San Martín y los nuevos elementos decorativos de motivos arbóreos, todo ello bajo la dirección de Luis Ángel Díez Serrano.

El paso es pujado por 94 braceros y va acompañado por la agrupación musical de la Cofradía del Santo Cristo de la Bienaventuranza.

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