Tras el tiempo de Navidad nuestros hermanos vestidores han procedido al cambio de terno a Nuestra Madre de la Divina Gracia para el primer tiempo ordinario de este año que acaba de empezar.
La imagen de Nuestra Madre está ataviada con saya negra con manto a juego, fajín de terciopelo morado bordado en oro y tocado de encaje.