Tras la celebración del Solemne Triduo en su honor, Nuestra Madre de la Divina Gracia ya ha vuelto a su capilla de la Iglesia Conventual de San Marcos. Como es habitual en estas fechas, se ha procedido a vestirla en honor a Todos los Santos.
Nuestra Madre luce el terno de luto negro y estrena un rosario del Papa Francisco traído del Vaticano, regalo de un hermano de la Cofradía.